Una vez más la Asociación de Amigos del Jardín Botánico de Córdoba ha cumplido sus objetivos de diversión formativa por el conocimiento del patrimonio natural y cultural, en este caso con la visita a la localidad jiennense de Baños de la Encina, que ofrece un soberbio castillo musulmán, unas iglesias de gran interés, palacios, un museo etnográfico, un molino harinero y toda una serie de yacimientos prehistóricos argáricos en su término municipal.

 

Fortín argárico de Migaldías

Después de un agradable paseo entre encinas y pinos, dimos vista al cercano pantano del Rumblar y siguiendo su borde, dimos con este fortín que se encuadra como una fortificación secundaria, arrosariada con otras, que defendía las vías que conducían hacia yacimientos de cobre y el cercano poblado mismo que los extraía, llamado Peñalosa, estudiado por la Universidad de Granada.

 

pantano del Rumblar

Pantano del río Rumblar

 

La cultura de El Argar fue resultado de la evolución de la cultura de Los Millares, llegando a significar la vanguardia evolutiva de toda la Península Ibérica en la Edad del Bronce a lo largo de la mayor parte del segundo milenio a. C. desde su centro neurálgico de las provincias de Murcia, Almería y Granada, extendiéndose hasta controlar los yacimientos metalíferos de Jaén y Córdoba. Constituyó un estado elitista, jerarquizado en castas con perfecta especialización del trabajo, establecido en zonas diferenciadas en los poblados para los diferentes oficios artesanales.

 

Fortín argárico de Migaldías

Fortín argárico de Migaldías

 

Fortín argárico de Migaldías

Fortín argárico de Migaldías

 

habitat-argarico

Hábitat Argárico

 

Castillo de Burgalimar (Bury al-Hamma, castillo de los baños)

Inmediato al pueblo y dominando al mismo, es un castillo omeya del s. X como reza en la lápida escrita en caracteres árabes expuesta en la puerta del mismo.

 

Castillo de Burgalimar

Castillo de Burgalimar

 

Consideramos poco fiable la datación por C14 de su construcción en época almohade (s. XII). Basta ver la magistral factura del tapial hormigonado de sus muros y compararlo por ejemplo con la mediocre obra almohade de las murallas de la Ronda del Marrubial de Córdoba para comprobar la calidad arquitectónica del esplendor omeya manifestado en las torres cuadradas adosadas, idénticas a las de la mezquita aljama de Córdoba, o los perfectísimos arcos de herradura de su portada y el aparejo a soga y tizón, típico califal, de la misma.

 

Castillo de Burgalimar

Patio del Castillo de Burgalimar

 

Castillo de Burgalimar

Exterior Castillo de Burgalimar

 

Castillo de Burgalimar

Castillo de Burgalimar

 

plano

Plano Castillo de Burgalimar


 

Texto y fotos
José García Romero